MONTALT RODRIGO JC, GARCÍA DELPECH S, GARCÍA POUS M, UDAONDO MIRETE P, SALOM ALONSO D
SUMMARY
CUSTOMISED CORNEAL RESHAPING. PEDIATRIC CASE REPORT
Introduction: «Customised corneal reshaping» is an overnight orthokeratology procedure with rigid contact lenses having a tetra-curve reverse geometry back surface. The purpose is the temporary reduction of myopia.
Case report: We present a girl, 10 years old, myopic, we used «customised corneal reshaping» technique obtaining a reduction of 3 diopters in right eye and 3.25 diopters in left one. With three months of treatment we obtained good refractive results.
Conclusion: This report confirms the efficacy of «customised corneal reshaping» in a patient of 10 years old presenting an evolutionary myopia. The use of rigid contact lenses having a tetra-curve reverse geometry back surface with double tear reservoir was useful in this case reducing myopia in the studied period.
Key words: Customised corneal reshaping, overnight orthokeratology.
RESUMEN
Introducción: El procedimiento denominado «moldeo corneal personalizado» consiste en la utilización nocturna de lentes de contacto (LC) permeables al gas con un diseño de doble geometría inversa. El efecto es la disminución de la miopía, mejorando la función visual durante todo el día, sin necesidad de ninguna corrección óptica durante el día, mientras el paciente realice este porte de LC.
Caso clínico: Se presenta el caso de una niña miope de 10 años de edad en la que aplicando la técnica del moldeo corneal personalizado se logra una reducción de 3,00 D en el OD, y 3,25 D en el OI. El tratamiento se mantuvo durante tres meses, obteniendo resultados refractivos estables.
Conclusión: El trabajo constata la eficacia del «Moldeo Corneal Personalizado» en una paciente de 10 años de edad que presenta miopía evolutiva. La aplicación de LC de doble geometría inversa con doble reservorio lagrimal fue eficaz en este caso, disminuyendo la miopía en el periodo estudiado.
Palabras clave: Moldeo corneal personalizado, ortoqueratología nocturna.
INTRODUCCIÓN
La ortoqueratología acelerada se define como una técnica que reduce temporalmente la miopía mediante la adaptación programada de lentes de contacto rígidas permeables al gas (LCRPG). Con el uso de estas lentes de geometría inversa, cuyo diseño es más cerrado en la periferia que en la zona óptica (ZO), la superficie corneal experimenta un cambio en su morfología —la zona central de la córnea se aplana y la zona periférica aumenta su curvatura—, produciéndose una rápida reducción de la asfericidad corneal. Se han descrito modificaciones refractivas, topográficas, biométricas y paquimétricas en pacientes jóvenes, analizando los niveles de respuesta (1). En la mayoría de los casos los resultados son buenos, habiéndose demostrado que la técnica es efectiva en la corrección de la baja miopía, entre 0,50 y 3,50 D, lográndose que la agudeza visual (AV) sin corrección sea óptima, entre 20/25 y 20/20 (2). Existe seguridad en el tratamiento sin alteraciones oculares significativas, siempre que el paciente cumpla un estricto control oftalmológico. Es reversible, permite abandonar la adaptación si se producen efectos no deseados, aunque en este sentido, también hay que indicar la necesidad del uso nocturno de lentes retenedoras para mantener los resultados en el tiempo.
Los últimos diseños de sistemas con geometría trapezoidal de alta permeabilidad han renovado el interés en este campo. Cabe destacar, el «Moldeo Corneal Personalizado» (en adelante MCP®, Laboratorio Lenticon), un procedimiento que consiste en adaptar lentes permeables de doble geometría inversa en terapia nocturna. Estas lentes, que generan un doble reservorio lagrimal, reducen el tiempo empleado en el tratamiento, alcanzando resultados más estables y logrando mayores disminuciones (entre 0,50 y 5,00 D) la miopía refractiva. Su diseño especial induce cambios en la morfología corneal durante la fase del sueño, con un efecto de rápida reducción de la miopía, obteniendo buena visión durante el día, sin necesidad de ningún sistema óptico corrector. Con una adecuada selección de los pacientes, no existe mayor riesgo de complicaciones corneales (edema, queratitis, infiltrados) respecto a una adaptación convencional con LC de uso prolongado (3). En 2002, la FDA (EEUU) aprobó el uso nocturno de la geometría inversa, siendo por tanto, un procedimiento clínico estudiado y aceptado. Aun así, no se debe descuidar el seguimiento del paciente por el oftalmólogo, dado que al tiempo que se producen los cambios refractivos también se presentan modificaciones en la morfología corneal.
El objetivo de esta publicación es describir el caso de una niña con miopía evolutiva. Se le aplicó el MCP durante tres meses. Se valoró su eficacia en la reducción de la ametropía, así como la estabilidad de los resultados obtenidos. Se analizaron los cambios refractivos, la visión, las modificaciones morfológicas y la presión intraocular (PIO), y finalmente, se compararon con los hallazgos de otros estudios.
CASO CLÍNICO
Niña de 10 años, usuaria de gafas y LC blandas desechables de reemplazo mensual desde hace cinco meses, una media de 12 horas al día. Su miopía aumentaba 0,75 D por año. Sus padres estaban interesados en un tratamiento para el control de la miopía evolutiva de su hija y acudieron a la consulta solicitando se le realizase un cirugía refractiva.
Presentaba una refracción: OD= –3.00 esf. –0.50 cil. 5º; OI = –3.50 esf. –0.50 cil 0º. La AV con corrección (optotipos de Snellen) era 1,000 en AO, y sin corrección, OD= 0,200; OI= 0,100. La curva de sensibilidad al contraste (VCTS) trazaba unos valores dentro de la normalidad. La motilidad ocular era normal. La binocularidad indicaba ortoforia y una estereopsis de 40". Las pruebas de color (test de Isihara y Farnsworth D-15) no mostraban alteraciones cromáticas. La PIO (tonómetro de aire) 14 mmHg en AO. El fondo de ojo era normal. No presentaba ninguna enfermedad ocular.
En el examen previo, se realizó la topografía corneal anterior basada en el disco de Plácido, mostrando un patrón típico de «pajarita simétrica». La superficie indicaba una geometría prolata, con una excentricidad de 0,52 en OD y 0,48 en OI. Se utilizaron dos topógrafos (Humprey Atlas Zeiss y KRP-7000P Topcon) para comparar los resultados. El examen con el biomicroscopio, indicaba una transparencia y fisiología corneal normal. El diámetro horizontal de iris visible era 11 mm. El tiempo de ruptura lagrimal (BUT) fue 15 seg, y el test de Schirmer I 25 mm/5 min. La prueba del verde lisamina fue negativa.
Se le explicó detenidamente a la paciente y a sus familiares, la contraindicación de cirugía refractiva, por lo que se valoró la realización de ortoqueratología.
Después de analizar los datos previos y se efectuó un pronóstico de la corrección de la miopía, con base en el valor de la excentricidad y en un cálculo empírico (3,14). El objetivo alcanzable según estos cálculos, era una reducción de 2.47 D en el OD y 2.30 D en el OI. En la tabla 1 se muestra el pronóstico, indicando la refracción (equivalente esférico) pre- y post- tratamiento.
Se usaron lentes MCP de geometría tetracurva, con bandas de cierre asféricas y diámetro total 10,40-10,60 mm, siendo el diámetro de la ZO 6,8-7,0 mm. Esta lente se divide en varias zonas:
Primera banda inversa (ZRL1): Es la primera curva que cierra el radio de la lente respecto al de la zona óptica, supone un reservorio lagrimal.
Segunda banda inversa (ZRL2): Es la zona que mejora el centrado y es otro reservorio lagrimal.
Zona periférica (ZP): Donde la curva de la lente se vuelve otra vez más plana para permitir el intercambio de lágrima.
Se utilizó el programa de cálculo MCP OK® (Laboratorio Lenticon) diseñado para adaptar las lentes de ortoqueratología con doble geometría inversa. En la figura 1 se ven los valores necesarios para el cálculo (Sim-k: rk, rc, y e: ek, ec). En la figura 2 se muestra la selección de los parámetros: Radio base, ságita corneal y espesores lagrimales necesarios para todas las zonas de la lente (ZO, 1.ª curva, 2.ª curva y levantamiento de borde).
Figura 1. Programa de cálculo
MCP.
Figura 2. Programa de cálculo
MCP.
Las lentes seleccionadas fueron: OD: 7.70/5.0/STD; OI: 7.65/5.0/STD. El diámetro total 10,60 mm y la potencia +0.50 D en AO. El material oxicon (fluoracrilato) con Dk 150. Se efectuó un estudio de idoneidad durante 5 h para comprobar la eficacia de las lentes; se valoraron los cambios, verificando la precisión del moldeo corneal, la disminución parcial de la miopía y la mejoría de la AV sin corrección. Se dio por válido el caso y se inició el tratamiento del MCP.
Los parámetros calculados por el software se contrastaron con nuestro criterio clínico. Los valores de las LC seleccionadas fueron: OD = 10,40/7,85/5,5/STD; OI = 10,40/7,80/5,5/STD. Las imágenes de la adaptación se muestran en las figuras 3 y 4.
Figura 3. Centrado de las LC.
Figura 4. Fluorogramas de las
adaptaciones de las LC.
El MCP se aplica habitualmente de noche, pero en este caso, debido a la corta edad de la paciente, se decidió establecer una fase previa diurna (7 días) para controlar con mayor precisión los cambios rápidos que se generan en la morfología corneal. Posteriormente, pasamos a la fase nocturna, analizando los resultados morfológicos y visuales después de la primera noche, a la semana, a las 2 semanas, al mes y a los 3 meses de uso nocturno. Las diferencias entre los parámetros pre- y post-adaptación MCP se muestran en la tabla 2.
El tratamiento duró 3 meses, consiguiendo una reducción de la miopía de 3 D en el OD, y 3.25 D en el OI, con una visión sin fluctuaciones durante todo el día. La mejoría de la agudeza visual sin corrección, se contrastó con la normalidad de la curva de sensibilidad al contraste.
Los resultados visuales obtenidos fueron:
OD: AVsc= 0.9+2; Rx= -0.25 esf; AVcc= 1.2; CSF= normal.
OI: AVsc= 0,9; Rx= -0.50 esf; AVcc= 1,2; CSF= normal.
AO: AVsc= 1,2+2.
El análisis de las topografías de la cara anterior indica aplanamiento de los radios de curvatura centrales (sim-k) y aumento de la curvatura en la zona corneal intermedia. Las figuras 5 y 6, en «patrón de diana» o «patrón de ojo de buey», muestran la homogeneidad de la ZO y la precisión del moldeo corneal.
Figura 5. Topografías
post-tratamiento.
Figura 6. Topografías
post-tratamiento.
La PIO era de 11 mmHg en AO. La biomicroscopía indicó la integridad de la fisiología corneal, sin la presencia de hallazgos clínicos (abrasiones, microquistes, etc.).
Los resultados fueron buenos, el grado de satisfacción de la paciente muy alto, su AV se mantenía estable sin corrección óptica, por lo que se dio el alta del tratamiento del MCP y se programaron las revisiones posteriores. En la actualidad (tras 11 meses de la adaptación), las variables se mantienen estables durante todo el día y la paciente solo utiliza las lentes dos noches por semana.
DISCUSIÓN
Después de realizar un pronóstico para la corrección de la miopía basado en la excentricidad corneal, se procedió al estudio de idoneidad del caso, que resultó positivo en todas las variables analizadas: Menor asfericidad corneal, reducción parcial de la miopía, aumento de la AV sin corrección, buena tolerancia y respeto de la fisiología corneal.
La noción convencional de la adaptación de LC que relaciona el radio de curvatura de la LC a adaptar con el radio K se debe olvidar en este procedimiento. Sin embargo, es muy importante la ságita de la LC y de la córnea (distancia entre el punto medio de la LC o de la córnea y la cuerda que une sus extremos), ya que en una adaptación ideal debe cumplirse una determinada relación entre ellas. Para el cálculo de las ságitas corneales es necesario conocer el radio de curvatura apical (ka) y la excentricidad (e), o bien, el sim-k y los valores de la excentricidad (ek, ec), datos que proporciona el topógrafo corneal. Disponiendo de estos dos valores y conociendo el diámetro de la cuerda de la LC a adaptar, que varía según el diámetro de ZO y ZRL a emplear, pudo calcularse la ságita corneal. La LC que consigue los efectos deseados debe separarse 10 micras en el ápex corneal, 20 micras en la zona paracentral y 60 micras al iniciar la ZRL. La lente que cumpla estos requisitos producirá los cambios morfológicos esperados, es decir, aumento de curvatura en la periferia de la córnea y aplanamiento en el centro.
Estos cálculos se realizaron con el programa MCP OK (figs. 1 y 2) que permitió obtener las ságitas, y que al introducirle los parámetros de la córnea indicó las LC control que cumplían con los requerimientos establecidos. El diseño de doble geometría inversa crea un doble reservorio lagrimal entre la cara posterior de la LC y el epitelio corneal, que provoca succión de la córnea por acción de una presión negativa que tiende a curvar la periferia corneal, haciendo que el centro se aplane aún más. La suma de los dos efectos —aplanamiento central y succión periférica— genera los cambios morfológicos de la córnea, produciendo disminución de la asfericidad corneal, y haciendo que la geometría de la superficie pase de prolata a oblata. Cuanto mayor sea la excentricidad, más D de miopía se podrán reducir, estimándose un promedio de 1 D por cada 0,20 de excentricidad. La proporcionalidad entre ambas variables no es exactamente lineal. Estos cambios son los que provocan la mejoría de la AV sin corrección, al reducir el defecto refractivo. También se ha indicado (4) la existencia de más factores que influyen en la reducción del defecto refractivo, tales como las curvaturas anterior y posterior de la cornea, la PIO, el espesor corneal, la longitud axial, la acomodación, etc.
En este caso, la reducción de la ametropía, se puede relacionar a priori con varios factores:
1. Aplanamiento corneal central: Se aplanó 2.5 D en el OD y 2.75 D en el OI.
2. Aplanamiento corneal apical: Disminuyó su potencia en 2.85 D en el OD y 3.23 D en el OI.
3. Disminución de la excentricidad: Pasó a ser negativa en AO (córneas oblatas), con una notable modificación respecto a los valores pre MCP.
4. Descenso de la PIO: Disminuyó 3 mmHg respecto a la inicial. Este factor se considera poco relevante, ya que no debe olvidarse la clara relación demostrada entre la paquimetría corneal y la medición de la PIO.
El MCP aplicado en uso nocturno (5) permitió obtener resultados más rápidos, evitando las molestias de la adaptación a las LCRPG, siendo un material de alta permeabilidad que resulta adecuado para esta terapia. Se realizó un cuidadoso seguimiento post-tratamiento para evitar posibles complicaciones. Es de resaltar que cuanto más plana es una adaptación, mayor puede ser la variabilidad en la respuesta y mayor la posibilidad de inducir una distorsión corneal.
Después de finalizar el tratamiento, a los 3 meses, se indicó un régimen de uso discontinuo (alternancia nocturna: 2 noches por semana) para mantener los resultados.
Para finalizar, cabe recordar que actualmente son muchos los pacientes que solicitan la cirugía refractiva como método de eliminación de su corrección óptica. No obstante, existen momentos en que está contraindicada la cirugía o que se podría post-poner (niños, futuros pilotos, etc.). Mientras tanto, como oftalmólogos, no deberíamos de dejar a dichos pacientes sin una solución médica. El uso de LC de doble geometría inversa con doble reservorio lagrimal aplicadas en terapia nocturna (MCP) ha sido eficaz en este caso disminuyendo la miopía. Los resultados obtenidos parecen interesantes, ya que puede ser una opción más para el control de la miopía evolutiva en pacientes jóvenes, sin necesidad de llevar de forma continua LC o gafas. No obstante, es importante señalar la necesidad de un estricto control oftalmológico en este tipo de pacientes.
BIBLIOGRAFÍA